
Con tantos eventos deportivos y con el mundial de fútbol a la vuelta de la esquina es posible que veamos anuncios sobre las competiciones por todos lados. Si ves el telediario, las noticias deportivas nos detallan las novedades cargadas de mucho léxico especializado, ya sea baloncesto, Fórmula 1, ciclismo o tenis. Si lees el periódico encontrarás muchas palabras que asocias a distintos deportes y que seguro que su presencia entorno a un texto en español no te supone seguramente ningún problema, pero para los profesionales del lenguaje es todo un campo de investigación. Para entenderlo mejor, vamos a desmenuzarlo.
¿Qué es el lenguaje deportivo?
Es la expresión oral del contexto deportivo que ayuda a comprender mejor cualquier tipo de actividad física y desemboca en la comunicación profesional. Lo más interesante: proporciona nuevas corrientes estilísticas y también representa culturalmente a muchas sociedades y culturas. ¿Te has parado a pensar alguna vez cuántas expresiones deportivas utilizamos en nuestro día a día?
Características
Si tuviéramos que destacar la principal característica del lenguaje deportivo podríamos darle una medalla olímpica a los extranjerismos. Sí, sí. Si te das cuenta no paramos de escuchar términos extranjeros en un discurso deportivo. Y, como ocurre en otras temáticas, predominan los anglicismos. ¿Quieres unos ejemplos?
El estadounidense Josef Newgarden (Team Penske), que comenzó desde la ‘pole position‘, firmó la cuarta plaza a 10.6 segundos de Will Power. (Mundo Deportivo)
En este ejemplo vemos claramente como se utiliza pole position en vez de primera línea de salida/parrilla, además, utilizan el punto para separar los decimales por influencia de la lengua inglesa.
Russell aparece como el tercer mejor piloto del curso en el ranking de la F1. (AS)
En este otro ejemplo parece que no se llevan bien con las cursivas cuando se tratan de extranjerismos (o comillas angulares en su defecto). ¡Recuerda! Hay opciones como clasificación que pueden sustituirse para este tipo de anglicismos, muy comunes cuando estamos hablando sobre deportes. (Aclaración: al ser una cita va en cursiva y, para marcar el extranjerismo tendremos que escribirlo en redonda).
A la cola del pelotón tenemos los famosos sinónimos, los errores y dudas sobre el género del léxico deportivo o sus plurales y la aparición de vulgarismos, típicos de la jerga periodística.
Para aclarar un poco más las dudas, la Real Academia Española y la Fundación del Español Urgente se han asociado para luchar contra estas diferencias entre términos.
Una de sus primeras actuaciones fue aclarar los términos de doble acentuación, es decir, aquellos términos que pueden llevar tilde o no (como más te guste). Algunas de ellas son: beisbol/béisbol; futbol/fútbol; Karate/Kárate; olimpiada/olimpíada, etc. Pero algo que nos gusta mucho es su clara posición ante el abuso de extranjerismos (anglicismos en su mayoría). Estos defienden que no es necesario el uso de estos barbarismos y que se prefiere la fórmula en español. Algunas alternativas son «aficionado, dopaje y foto de llegada» para amateur, doping y foto finish.
Pero el lenguaje no termina ahí. Cada día utilizamos más expresiones deportivas… ¡más de lo que imaginamos! A ver si te identificas con algunas de estas:
- Tirar balones fuera (fútbol)
- Tener más moral que el Alcoyano (fútbol)
- Tirar la toalla (boxeo)
- Estar contra las cuerdas (boxeo)
- Recibir un golpe bajo (boxeo)
- Salvarse por la campana (boxeo)
- Quedarse fuera de juego (fútbol)
- Dejar todo en tablas (ajedrez)
- Ser de piñón fijo (ciclismo)
- Pillarse un rebote (baloncesto)
¿Te han sorprendido estas expresiones? El lenguaje deportivo define nuestra cultura, los gustos y expresiones de diferentes personas y comunidades. Aprendamos de ellas y también cómo escribirlas correctamente.
Si quieres saber saber algunas claves de redacción sobre el lenguaje deportivo, en concreto el tenis, te recomendamos que veas nuestra última publicación en redes sociales.
¡Hasta la próxima entrada, deportista!
Silvia Nieto