Programas de gestión de redes sociales

Es una realidad que cada vez nuestra vida gira entorno a las redes sociales, ya sea para compartir lo que vivimos, relacionarnos, hablar e incluso para vender. Sí, las redes sociales tienen muchos usos en el terreno de las ventas y la publicidad (de ahí nacen las famosas influencers que venden productos u ofrecen descuentos de diferentes marcas).

El sector de la traducción y las redes sociales también guardan relación. Es un medio en el que se genera comunidad entre los diferentes profesionales, se debate, se comparte conocimiento y se publicitan los servicios que cada persona hace como profesional de la traducción. Es como una ventana a nuestro negocio.

El sector tecnológico está preparado para ayudarnos a sobrellevar esta tarea, así que han creado diferentes programas y aplicaciones para facilitarnos la vida y poder gestionar todo el contenido que queramos compartir. ¡Toma nota!

META BUSINESS SUITE

Es la herramienta propia de Facebook para la gestión de sus redes sociales. Una alternativa gratuita y con grandes funcionalidades.

Permite administrar toda la información de tus canales sociales pertenecientes a Meta (Facebook e Instagram). Te permite crear y programar contenido, administrar las cuentas, promocionar publicaciones, gestionar anuncios, medir resultados e incluso te muestra las notificaciones.

BUFFER

Esta herramienta te permite programar contenidos de manera ágil y sencilla en Twitter, Facebook e Instagram, aunque no permite programar las historias de Instagram (eso ya tendrás que hacerlo de forma manual).

Tiene una versión gratuita, así que no cunda el pánico. Recientemente mejorada, cumple las necesidades que cumplía Hootsuite e incluye nuevas. Permite gestionar hasta 5 perfiles e incluye un apartado de análisis y recomendación de horarios de publicación. El diseño de página es sencilla para móvil. ¡Todo ventajas!

METRICOOL

Herramienta multitarea, ya que te permite centralizar la programación del contenido en todos los canales sociales, así como la monitorización y análisis de los resultados mes a mes.

Aunque sea de pago y no muy cara, también tiene una versión gratuita en la que ofrece muchos de sus servicios Premium. Es la herramienta que más tipos de canales sociales permite vincular (Twitter, TikTok, Twitch, etc.). Podrás analizar los datos de la web y las redes sociales (monitorización de campañas de pago y de la competencia). Planificador de contenidos y recomendación de horas. Permite crear Smartlinks.

GOOGLE ALERTS

Esta extensión de Google permite la monitorización y curación de contenidos. Si queremos conocer las diferentes noticias, este función permite conocer las fuentes de las noticias que más nos interesen y podremos acotarlas mediante palabras clave. Todo lo que se publique en Google con las palabras clave que hayas seleccionado te llegará al mail diariamente o semanalmente (como elijas) en forma de informe.

GOOGLE TRENDS

Este programa te facilita la detección de tendencias y los canales de conversación o los temas más mencionados en redes. Esta funcionalidad de Google permite conocer las tendencias de búsqueda del público en Internet. Así te será más fácil conocer qué se cuece y poder dar soluciones a esos temas.

FEDDLY

Esta herramienta ofrece un espacio de gestión de noticias de interés a través de lector de feeds. Ayuda a curar los contenidos y tiene una versión gratuita. Pruébala.

HASHTAGIFY

Con este programa la búsqueda de datos sobre hashtags en Twitter u otros canales será de lo más sencilla. Es gratuita, así que no hay excusas para no utilizarla. Además, antes de publicar cualquier tipo de información, podemos ver qué alcance está teniendo un hashtag para usarlo o no en nuestra publicación.

Conociendo estos programas, la creación y gestión de contenidos no se hace tan cuesta arriba, ¿verdad? Esperamos que te sirvan y ¡a crear!

Silvia Nieto

Creación de contenidos: ese cajón de sastre

Foto de Austin Distel en Unsplash

Hoy en día, es poco común no estar presente en el mundo digital, ¿verdad? Los medios a los que antes accedíamos separadamente para informarnos como los periódicos, las enciclopedia, la radio o la televisión convergen prácticamente en un único objeto: el teléfono móvil. A través del mismo, también descargamos aplicaciones esenciales en nuestra comunicación diaria como las redes sociales (Whatsapp, Instagram, Twitter…). Cada una de ellas tiene un formato y una funcionalidad diferente, ofreciendo contenido muy variado por el que transmitir desde las últimas tendencias de moda hasta consejos para llevar una vida sana, entre otros. Con el grandísimo éxito de estos medios, las empresas no han tardado en sumarse al carro de las redes sociales e Internet implantando su presencia en línea.

Con aspectos a tener en cuenta como el algoritmo, la identidad visual, etc. surgieron nuevos perfiles profesionales para cumplir con esta nueva idea de mercado, el marketing digital. Son muchas las vías formativas que se pueden tomar para ejercer como profesionales en este interesante sector además de los propios estudios en marketing digital: a través de publicidad, periodismo, filologías y, por supuesto, traducción.

Traducción y marketing es una combinación bastante interesante y beneficiosa para quienes trabajen en ello, pues es una doble función que se puede ofertar a los clientes con presencia internacional.

¿En qué formatos se presentan?

¡Infinitos! Todo dependerá del contenido que quieras comunicar. Varios factores como la disponibilidad para crear el contenido, el público meta y las plataforma en la que se encuentren variará la estrategia y el diseño del contenido para que funcione. Por ejemplo, es muy poco funcional poner una imagen estática en tu canal de YouTube cuando la plataforma funciona con vídeos. Es necesario ir adaptando el contenido a la plataforma que se va a utilizar para que la información se diversifique y sea interesante, lo que puede resultar en más tráfico (visualizaciones), engagement (interactividad) y conexión emocional con el público objetivo.

Los formatos más utilizados actualmente para compartir la creación de contenidos son las publicaciones de fotos e imágenes con mensaje, reels, historias, vídeos, streaming en canales de vídeo, audiolibros, pódcasts, newsletters, memes, entrevistas, blogs, etc. (Acortamos para no hacer una lista infinita, de verdad).

Pero lo que sí que nos gustaría destacar es la gran aparición de dos estrategias de comunicación en el universo digital —por no hablar de la afluencia que está teniendo en los últimos años—: el copywriting y el storytelling. ¡Vamos a conocerlos!

¿Qué es el copywriting?

Para comenzar, el copywriting es la habilidad de escribir de manera persuasiva cualquier tipo de texto que para conseguir que tu cliente/objetivo ideal realice una acción. Esta técnica de redacción persuasiva ayuda a conseguir el objetivo que se haya planteado la empresa para la que trabajes o para tu propio negocio y su finalidad siempre será la de comunicar y vender.

Para conseguirlo, tendrás que definir ciertos aspectos como tu cliente ideal, con qué problema o necesidad puedes ayudarle a resolver y cómo vas a solucionar su problema. Además, tendrás que definir unas estrategias como el tono de tu discurso, lo que se materializará en cuestiones como si tus textos son formales, cercanos, inclusivos, etc.

Otro punto importante es que especifiques tu discurso lo máximo posible para poder crear un vínculo emocional y de identificación con el lector/a. Al empatizar, nuestra persona objetivo sentirá que somos las personas adecuadas para solucionar sus problemas o para trabajar codo a codo. ¡Son todo beneficios!

Pero, como en todo sector, los caminos se diversifican. Existen varios tipos de copywriting. Los más destacados son:

  • Creativo: es el copy que ayuda a posicionar como referencia del mercado a una empresa, así como publicitar la marca.
  • SEO: es el que ayuda a posicionar los textos en Internet, así como mejorar el algoritmo del sitio web y aparezca en los primeros textos de Google.
  • Marketing: es escritura dedicada a la venta. Todo el contenido y mensajes que envía la empresa/marca para seducir a su público objetivo y conseguir que compren sus productos.
  • Técnico: es el copy de especialización, es decir, textos que hablan sobre un tema muy particular.

¿Qué es el storytelling?

El storytelling es la técnica de narrar historias, como bien se traduce. Es el arte de transmitir toda la historia de tu marca/empresa, tus objetivos y lo que quieres desde un plano más emocional para conseguir un ambiente idóneo en el que se consiga conectar con el público meta el mensaje que estás transmitiendo. Puedes conseguirlo a través de la historia en distintos formatos, ya sea por escrito, por audio o en vídeo.

Esta técnica tiene una trayectoria específica para contar una buena historia: 1) construir un mensaje; 2) pensar en el ambiente; 3) identificar a los personajes; 4) plantear un conflicto y solucionarlo con el aprendizaje.

Al igual que ocurría con el copywriting, el storytelling plantea diferentes tipos:

  • Ficción: narra unos hechos irreales en los que destaca el vínculo con la situación que atraviesa el personaje o los valores que representa.
  • Histórico: cuenta la historia de tradición o reputación de la familia por la que empezó el negocio, así generan nostalgia y humanidad a la marca que representan.
  • Situaciones reales de consumo: representan hechos o situaciones reales en las que el público objetivo se identifica o muestra su realidad. Son historias comunes que ayudan a conectar con la realidad.
  • Valores de marca: ayuda a relacionar el discurso basado en unos valores concretos con la marca que representa. De esta manera, será una asociación muy clara y que ayuda a mejorar el concepto de la empresa/marca entre el público.

Para terminar, queremos destacar la función tan importante que tiene la creación de contenidos en la actualidad. Transmitir un mensaje con claridad y conectar con un público específico no se había diversificado tanto hasta hace unas décadas. Es un sector amplio, donde la creatividad reina en sí misma y donde los traductores y traductoras podemos aportar nuestro valor lingüístico.

¡Feliz verano y… nos vemos en la próxima entrada!

Silvia Nieto